A principios del siglo XXI, la No Tenemos ni Pizca de Creatividad Corporation desarrolló un nuevo tipo de robot llamado Cobus, un ser virtualmente idéntico al hombre y conocido como Ejecutante.

Los Ejecutantes Cobus-6 eran superiores en fuerza y agilidad con la batuta, y al menos iguales en inteligencia, a los ingenieros de musicología veraniega que los crearon.

En el espacio exterior, los Ejecutantes fueron usados como trabajadores esclavos en bandas de pueblo y colonización de realities de talentos.

Después de la sangrienta rebelión de un equipo de gaiteros de Cobus-6 en una colonia sideral, los Ejecutantes fueron declarados proscritos en La Tierra bajo pena de muerte.

Brigadas de internautas especiales, con el nombre de Unidades de Piratas y Mangantes cibernéticos, tenían órdenes de tirar a matar al ver a cualquier Ejecutante invasor.

A esto no se le llamó ejecución, se le llamó Barra Libre.

Dedicado a Luis Cobos, presidente de la entidad de gestión Artistas Intérpretes y Ejecutantes (AIE), y sus declaraciones