Dos hombres se encontraron en un claro del bosque. Tras examinarse largamente habló primero el más joven.
Lllevo varios días buscando la salida de este bosque de forma infructuosa. Cada vez que me pongo en marcha mis pasos me llevan irremisiblemente a un claro similar a éste con un extraño monolito.
El más viejo tosió y se atusó la barba antes de hablar.
Busco ese monolito, es muy importante para mi gente. Pero siempre que intento llegar hasta él mi camino desemboca fuera de este bosque.
Mantuvieron sus miradas de nuevo, sin saber que decir a continuación.
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Leer el anterior microrrelato:Incorrupta
Tags: Microrrelatos
Está muy bueno el microrrelato, pero no me gustó que pusieras
“al estilo de Paulo Coelho” pues es superior a cualquier cosa que haya escrito éste. Se nota que no me gusta ese escritor menor
al que sí le reconozco gran habilidad para captar lectores del tipo “autoayuda” (Ojo, ésto no invalida la calidad de tu relato)
Saludos, y esperamos otro
Los símbolos dominan nuestras vidas desde siempre. ¿Sabremos interpretarlos como dicen sabían hacerlo nuestros antepasados?
Yo me siento incapaz de explicar tantos símbos juntos:juventud, vejez, camino, bosque, miradas…
Alfredo gracias. He leído poco de Coelho. No me seduce demasiado pero creo que se le denosta de manera exagerada.
Julio, no te esfuerces, este relato es más que nada un
. La interpretación es, necesariamente, libre.a lo mejor coelho no es otra cosa que espuma, y todos los símbolos hacen sshh y se desvanecen, porque no son sino aire disfrazado
un saludo